Unos cuerpos son como flores, otros como puñales, otros como cintas de agua; pero todos, temprano o tarde, serán quemaduras que en otro cuerpo se agranden, convirtiendo por virtud del fuego a una piedra en un hombre.
Pero el hombre se agita en todas direcciones, sueña con libertades, compite con el viento, hasta que un día la quemadura se borra, volviendo a ser piedra en el camino de nadie.
Yo, que no soy piedra, sino camino que cruzan al pasar los pies desnudos, muero de amor por todos ellos; les doy mi cuerpo para que lo pisen, aunque les lleve a una ambición o a una nube, sin que ninguno comprenda que ambiciones o nubes no valen un amor que se entrega.
En noches como ésta falta tanto; es cuando quisiera sentirte cerca, ser todos los lunares que te faltan.
Hay tantas calles que no hemos paseado y todas las canciones que aún no inventamos y todos los pasos en falso que no hemos dado la ausencia de todo eso me repite al oído que esto en realidad no ha comenzado.
Y hablar las historias que no conversamos porque en silencio y a solas nos quedamos es todo tan raro cuando juntos estamos.
Me falta ver tu rostro sonrojado o tus ojos escapando y los míos también o jugando a que se encuentran las ideas para luego perderse en soledades compartidas.
Me falta tanto de ti: tus preguntas domésticas tus verdades culinarias tus gritos de locura ego tus arranques de atenciones.
Todo esto está ahí y es tanto o más atractivo que pensar en todo lo que ya está; todo esto clama mi atención y corona de flores y frutos silvestres las doncellas de mi alma enamorada.
Me hace falta ser guitarra pero no cualquiera de ellas, sino la tuya, y reirme contigo (no de ti) cuando me pongas el calcetín de lana.
Me falta que nuestras libertades se busquen y que se encuentren más seguido, o tal vez no tan frecuentamente pero sí que lo hagan en forma total.
Me hace falta llevarte mi voz y mi olor me falta sentir los tuyos. Me falta un sendero mágico que comunique nuestras casas para visitarte en tus noches de sueños.
Me falta cocinar para ti y que me digas que está delicioso. Me falta componer otra melodía pero que hable de nosotros y de lo que todavía no nos contamos.
Me hace falta que no me hagas falta para no seguir ocupando mi mente en sueños como éste.
De cuerpo en cuerpo, la mente se pierde, el espíritu se cansa, se gasta, agoniza en orgasmos vacíos. Ésos sí que suenan agudos, sordos y huecos. Que los lunares que te faltan por conocer te den aquello que tu sexo no encuentra, por más que tu agenda enliste cada vez más nombres de terciopelo negro. Que al menos el placer de la carne ardiente te llene los abismos de la existencia. Que entre tanto ir y venir por corazones ajenos no te marees, que no te pierdas. Que después de tanta piel, de tanto tocar y tanto deseo, cuando se te canse el cuerpo, no descubras que se te fue el tiempo. Que no te pase eso, eso es lo que ahora deseo. Que la fama de canalla se haga la tonta y no te cobre las lágrimas de todas esas otras. Que tu vida sea mucho más que una buena fiesta, y que haya alguien contigo en la mañana si despiertas. Que ese alguien no intente domar lo que no tiene dueño, que no ose anular lo que tienes de bueno. Si descubres una estrella que valga la pena, que no la pierdas en tus sábanas de seda.
AUTOR: Fernando Ubiergo ALBUM: La Sombra Del Aguila (2003)
Intro: D#m B7+ D#m A#m
D#m B7+ Abre las ventanas de tu castillo negro D#m A#m deja que la lluvia se hunda en el mar D#m G#m con las siete llaves de tu silencio D#m A#m con las alas rotas para volar D#m G#m niña de los ojos sol naciendo B7+-A#m D#m yo te he visto llorar
Intermedio:D#m D#m/F B7+ D#m D#m/F A#m
D#m B7+ Tu juntabas flores al fondo del invierno D#m A#m siempre luminosa como un cristal D#m G#m supe que en mis manos llevaba un trueno D#m A#m y tu sonreías sin sospechar D#m G#m puse yo mis ojos en tus ojos B7+-A#m D#m y vi la vida pasar
Intermedio:D#m D#m/F
D#m D#m/D Déjame entender, no quiero pensar D#m/C# D#m/C traes un puñal bajo las alas B7+ B7+/C sálvame ya de esta sensación B7+/C# B7+/D de caer y morir B7+/D# B7+/E y volver a morir
B7+ A#m G#m Será... será... será D#m esta soledad... B7+ A#m G#m será... será... será D#m que hoy no puedo hablar B7+ A#m D#m no hay siglos para olvidar B7+ A#m no hay siglos para olvidar
Intermedio:D#m D#m/F B7+(x2)
D#m B7+ Y sentimos frío, vacío el universo D#m A#m el sendero inverso de la soledad D#m G#m se hizo noche el día, se quebró el tiempo D#m A#m y nos abrazamos para ayudar D#m G#m aprendimos con ojos mojados B7+-A#m D#m que nunca más será igual
Intermedio:D#m D#m/F
D#m B7+ Háblame del sol, de algún país D#m B7+ donde pueda estar a donde ir G#m A#m sin esta lluvia en mi .